Empresa
Animados y entusiasmados por el ejemplo de ROCHDALE, un grupo de obreros resuelven fundar una cooperativa, inspirados en el resultado fecundo que se comentaba sobre semejante tipo de organización.
La óptica de un visionario: Dr. Pablo Zunin Padilla.
Más allá de su destacada trayectoria personal, impulsó desde su banca en la Junta Departamental de Paysandú, la creación de una Cooperativa de Transporte de Pasajeros, formada, por aquellos empleados que quedaran sin su empleo como consecuencia del cierre de la empresa ERSA.
En un clima de incertidumbre y ante la incredulidad de algunos y la fe y esperanza de otros, se cristalizo el sueño y el ideal del Dr. Zunin Padilla, ese 5 de marzo de 1953, fecha en que la flamante cooperativa echo andar un pequeño grupo de unidades, tomando a cargo una tarea, que hoy tiene ya, 60 años, sin interrupciones.
Poco a poco desde aquel ´53, aquellos que creyeron irreal y utópico la puesta en práctica de este sistema cooperativo, fueron tomando conciencia y viendo con sus propios ojos, que aquello no era tan imposible, que la unión hizo, hace y hará la fuerza siempre, y que todos juntos somos uno, y 60 años de vida lo demuestran y son ellos los mejores testigos de esta realidad.
En este entorno, COPAY pasó a ser la primera empresa de Transporte colectivo de pasajeros que aún hoy mantiene orgullosamente su condición de COOPERATIVA, siendo la pionera en su género.
Corresponde por tanto expresar la imperecedera gratitud a quien fuera el verdadero gestor de esta realidad, el Dr. Pablo Zunin Padilla y quienes junto a él emprendieron esta verdadera cruzada.
Nuestro comienzo.
Asesorados y dirigidos por el Dr. Pablo Zunin Padilla a principios del año 1953 se realiza la primera Asamblea general de integrantes, de la cual surge el primer Consejo Directivo.
Presidente : Carlos Moreira
Vicepresidente : Juan Fagián
Tesorero: Alberto Dodero
Secretario : Miguel Rotundo
Vocal : Dionisio Penna
El día 5 de Marzo de 1953 comienza a actuar la cooperativa, transformando de esa manera su aspiración en una verdadera realidad. La integran 20 socios, entre conductores, mecánicos y administrativos, (en su mayoría provenientes de la disuelta compañía ERSA). Según se establece en los estatutos de aquel entonces los socios fundadores fueron:
Eulogio Graniero / Federico Wais / Felix Conrado Botta / Luis Alberto Dodero / Hugo Amici Nicolas Mastkeeff / Tomás Perez /José Giossa / Antonio Perg Uraga / Juan Miguel Rotundo Luis Moreira / Carlos Moreira / Julio Gonzalez / Raul Bottino / Juan Francisco Fagián Dionisio Penna / Eustaquio Ríos / Domingo Vissio / Julio Aramburú / Erico Bentancourt.
Con el respaldo del gobierno departamental de turno y el esfuerzo sin límites de los flamantes cooperativistas que se integraban al quehacer ciudadano, COPAY fue superando gradualmente, sin prisa pero sin pausa, los numerosos y crecientes problemas que le presentaba la realidad de aquel entonces.
En los comienzos se contaba con una flota de trece ómnibus marca REO (importados desde Estados Unidos) de los cuales solo 7 se encontraban en condiciones de prestar servicio.
Se trabajaba día y noche para poder así, cumplir con lo prometido; por eso al comienzo, el modesto obrero cooperativista vivía mas para la Cooperativa que para su hogar.
Algo de Historia.
Cubierta la demanda en el ámbito urbano, COPAY pasó a explotar un servicio regular de pasajeros entre Paysandú y el paraje denominado Paso de la Cruz (Depto.de Rio Negro) pasando por Young y la localidad de Menafra.
Esta línea era atendida con tres frecuencias por semana, y los pasajeros debían registrarse con anticipación ya que se les pasaba a buscar a domicilio. Año después se iniciaba el tránsito por Ruta 26, donde se fue ganando la confianza de la gente con el paso del tiempo.
En primera instancia se llego a la localidad de Tambores, luego Tacuarembó y por último Rivera. En todo momento los pobladores, cercanos algunos y no tantos otros, fueron acompañando a COPAY en su esfuerzo. Ellos han sido testigos de esta realidad, más que eso, han sido los protagonistas de estas etapas, y para ellos COPAY tiene un especial reconocimiento de gratitud. La ruta no era ruta, sino un camino de tierra y era casi habitual en temporadas de lluvias, que los ómnibus quedaran literalmente “enterrados” en el barro, y fueron los vecinos con sus tractores, sus camiones, sus improvisados guinches quienes nos ayudaron a superar aquellos trances.
Al inaugurarse el puente General Artigas, COPAY incursiono en el ámbito internacional dejando establecido el Primer Servicio por Carretera entre la Republica Oriental de Uruguay y la República Argentina, con la ciudad de Concepción del Uruguay como destino final, pasando por Colón provincia de Entre Ríos.
En la década de los 80 COPAY gestionó y obtuvo la autorización correspondiente para realizar el servicio entre las ciudades de Paysandú y Montevideo, constituido al día de la fecha en el mejor de todos los concebidos por la Empresa.
Una vez que el gobierno nacional dejo sin efecto el transporte de pasajeros por ferrocarril, COPAY fue una de las empresas que asumió la responsabilidad y hasta el día de hoy la cumple fielmente, el servicio “Paysandú-Guichón-Tacuarembó” por sus iniciales, el conocido “P-G-T”. Servicio este que unía Guichón, Piñera, Merinos, Tiatucura, Piedra Sola, Tres Arboles, etc.
Poco tiempo después la Cooperativa, basada siempre en los principios de la doctrina, avanzaba en su marcha ascendente. Trataba por todos los medios de mejorar el Transporte, servir cada día mejor al usuario y estimular y ayudar a los obreros semejantes, con tarifas reducidas.
Esta fue la base del éxito obtenido , sumado a la buena voluntad de hombres bien inspirados, condiciones estas que nos hacen comprender hoy , cuánta razón tenían aquellos veintiocho tejedores de ROCHDALE, primeros Cooperativistas del Mundo.
Hoy a los pies de nuestro 60 aniversario, gracias al trabajo, a la pujanza, al coraje de aquellos 20, al inexorable ideal del Dr. Zunin Padilla, de forjar un nuevo sistema de trabajo, de concebir la primera Cooperativa de Transporte del Uruguay. Nuestro enorme agradecimiento a quienes fueron, de los que hoy somos parte de este orgullo, de esta pasión de ser un granito de arena en esta realidad. Orgullosamente sanduceros, orgullosamente Cooperativistas, orgullosamente COPAY.
